El gobierno de Perú decidió romper relaciones diplomáticas con México -aunque aclaró que se mantienen conversaciones a nivel consular- por el asilo que este país dio en su embajada en Lima a una exministra bajo investigación judicial por el fallido golpe de estado que quiso dar el expresidente Pedro Castillo en 2022.

La persona en el centro de la cuestión es Betssy Chávez, la antigua jefa de gabinete del expresidente, quien hoy está siendo juzgada junto con él y otros ministros de su administración. La causa, como se mencionó, se centra en el turbulento episodio del 7 de diciembre de 2022, en el que Castillo aparentemente quiso adelantarse a una inminente moción de censura parlamentaria -en un país donde el Poder Ejecutivo ha estado fuertemente condicionado por el legislativo- disolviendo el Congreso, interviniendo la Justicia y asiendo la totalidad del poder político, como testificó bajo juramento su exasesor Aníbal Torres.

La ex jefa de gabinete de Pedro Castillo, Betssy Chávez, se refugió en la embajada de México en Perú mientras enfrenta el juicio por el autogolpe del expresidente en diciembre de 2022 / Créditos: Infoperú

Chávez, quien también estuvo al frente de las carteras de Cultura y de Trabajo y Promoción del Empleo, fue nombrada en su último cargo un mes antes del fallido autogolpe, en el que está imputada como coautora. La expremier ya había sido acusada de querer asilarse en la embajada mexicana después de aquel episodio, lo que la llevó a ser puesta en prisión preventiva. En septiembre, fue liberada mientras avanzaba el proceso en su contra, dado que se había vencido el plazo de 18 meses que se la podía tener detenida sin un mandato judicial.

También era difícil dar con su paradero en los últimos días de la causa que enfrenta el expresidente y un grupo de sus ministros. La última vez que se había presentado ante la Sala Penal Especial de la Corte Suprema fue el 24 de octubre, cuando realizó una breve intervención remota para justificar su ausencia por motivos de salud. En los días siguientes, el certificado de salud fue desmentido por la clínica que supuestamente lo había emitido, lo que llevó a la expulsión de su abogado defensor y puso alerta sobre el paradero desconocido de Chávez.

El expresidente de Perú, Pedro Castillo, enfrenta un proceso judicial por el intento de autogolpe que realizó en diciembre de 2022 / Créditos: archivo

México asila a Betssy Chávez y Perú rompe relaciones diplomáticas

El ministro de Asuntos Exteriores de Perú, Hugo de Zela, fue quien confirmó a través de un comunicado de la Cancillería que la expremier prófuga había pedido asilo en la embajada de México en Lima, un hecho que precedió a una escalada diplomática que hoy lleva a la ruptura de relaciones oficiales.

“En un acto inamistoso que se suma a la serie de acciones de injerencia inaceptables del Gobierno mexicano hacia el Perú, la Embajada de ese país en Lima ha informado en la fecha que su gobierno ha concedido asilo diplomático a la señora Betssy Chávez Chino. Este hecho evidencia la profunda falta de interés del Gobierno de México por mantener una relación con el Perú”, reza la comunicación oficial. “En consecuencia, el Gobierno de la República del Perú ha decidido romper relaciones diplomáticas con los Estados Unidos Mexicanos“.

La postura de México sobre la situación institucional en Perú es diametralmente distinta a la de la justicia de ese país, ya que considera que su mandato fue puesto en jaque por el mismo Congreso que lo acusa de destituyente. Así fue expresado por la presidenta Claudia Sheinbaum el pasado agosto, cuando se reunió con Guido Croxatto, uno de los abogados de Castillo: “En nombre de México, expresamos nuestra más profunda solidaridad con Castillo y su familia. Su situación no sólo es un caso personal, sino un grave precedente de persecución política y discriminación en nuestra región”. La mandataria también pidió la intervención de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) por su libertad, algo que le valió ser declarada persona no grata por la Comisión de Relaciones Exteriores del parlamento peruano.  

Hoy el gobierno de Lima, en manos del presidente interino José Jerí luego de la destitución de la antigua vicepresidente de Castillo, Dina Boluarte, ha llevado un paso más allá su alejamiento de México. Sin embargo, el canciller de Zela se apresuró a aclarar que la ruptura de relaciones se da al más alto nivel, y que los vínculos consulares permanecen intactos para ciudadanos de ambos estados: “Quiero resaltar que el hecho de que hayamos roto relaciones diplomáticas con México no significa, reitero, no significa que hayamos roto relaciones consulares. Por consiguiente, nuestros compatriotas en México continuarán bajo la protección de nuestros cónsules en ese país, así como los mexicanos que viven en el Perú continuarán bajo la protección de las autoridades consulares mexicanas en nuestro país”.

En tanto, la administración de Sheinbaum en México respondió a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), calificando la acción de “excesiva y desproporcionada”. “México lamenta y rechaza la decisión unilateral del Perú de romper relaciones diplomáticas como respuesta a un acto legítimo y apegado a derecho internacional”, reza la primera parte del comunicado oficial, donde defienden que su accionar se enmarca en lo establecido por la Convención sobre Asilo Diplomático de Caracas (1954), de la cual tanto México como Perú son firmantes.

Te puede interesar: Quién es José Jerí, el nuevo presidente de Perú tras la destitución de Dina Boluarte

Redacción
Equipo de redacción de Escenario Mundial. Contacto: info@escenariointernacional.com

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí