Un informe publicado el pasado viernes por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés), respecto a las Estimaciones de Oferta y Demanda Agrícola Mundial, arrojó que la mayor parte de las estimaciones de producción y uso de cultivos realizadas no sufrieron cambios, y se estima que no sólo continuará sin registrar grandes aumentos, sino que probablemente el mundo se enfrente a una reducción de la cosecha de trigo. 

En este sentido, si bien el USDA proyectó mayores volúmenes de exportación de maíz para Ucrania, sin embargo, redujo las estimaciones de exportación de maíz para países como Estados Unidos, Rusia y la Unión Europea. Asimismo, el precio promedio de maíz de la temporada registró una reducción de 10 centavos a $6.70 por bushel según los precios observados hasta la fecha. 

Mientras que en simultáneo, en cuanto a las proyecciones de suministro y uso de soja para los años comerciales correspondientes al 2022 y 2023, el informe sostiene que: “Según una revisión de la regla propuesta recientemente por la EPA para los objetivos de obligación de combustible renovable, el aceite de soya utilizado para biocombustible para 2022/23 se reduce en 200 millones de libras a 11,6 mil millones”.

Y agrega: “Las exportaciones de aceite de soja también se reducen debido a las ventas de exportación históricamente bajas hasta noviembre. Con un uso reducido de aceite de soja para biocombustibles y exportaciones, aumentan el uso de alimentos y las existencias finales”. El pronóstico del precio promedio de la soja de la temporada de Estados Unidos permanece sin cambios en $14.00 por bushel, mientras que el precio del aceite de soja se reduce en 1 centavo por libra a 68 centavos. 

Condiciones climáticas que preocupan

El informe también redujo las estimaciones de producción de trigo de Argentina en un valor de 3 millones de toneladas, con reducciones en el área de cosecha y en el rendimiento de la producción como consecuencia de las continuas condiciones climáticas secas generalizadas que se están dando en todo el país, que afecta los campos y la cosecha de soja. De concretarse esta estimación, sería la producción más baja registrada desde los años 2015 y 2016 para Argentina. 

Por otra parte, se redujo el consumo mundial de trigo de 1,6 millones de toneladas, principalmente producto de un menor uso de piensos y residuos por parte de la Unión Europea y Ucrania. Pero como dato alentador, se estima que comercio mundial aumentará de 2,2 millones de toneladas a 210,9 millones gracias a las mayores exportaciones de países como Australia, Ucrania, la Unión Europea y Rusia, que lograrán compensar de manera positiva las menores exportaciones por parte de Argentina – que será sometida a observación por expertos debido a la situación climática de sequía que atraviesa, y que reduce su producción -. 

Te puede interesar: Estados Unidos advierte sobre el crecimiento de la alianza de defensa entre Rusia e Irán

Redacción
Equipo de redacción de Escenario Mundial. Contacto: info@escenariointernacional.com

Dejá tu comentario