El pasado jueves, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, nombró un nuevo ministro del Tesoro y Finanzas debido a la renuncia de Lutfi Elvan a su cargo.
El reemplazo se debe a la caída de la lira turca a mínimos históricos. Elvan pidió “ser perdonado del trabajo” y que aceptaran su solicitud.
Las preocupaciones desde el gobierno sobre la política económica y el destino del país son altas frente a esta situación con la moneda y a los recortes en los costos de préstamos, producto de una inflación “vertiginosa”.
Se estima que desde principios de año la moneda turca perdió alrededor del 40% de su valor.