La escalada de tensión entre Pekín y Taipéi, caracterizada por la significativa presión que China está ejerciendo sobre el país insular, genera preocupación en altos mandos taiwaneses. En este contexto, Andrew Yang, quien ocupó los cargos de ministro y viceministro de Defensa de Taiwán, advirtió sobre el riesgo latente de un accidente militar entre ambos países. Según el exfuncionario, el incremento de operaciones en las denominadas “zonas grises” y la ausencia de canales de comunicación entre ambos gobiernos, están generando las condiciones propicias para un incidente en el corto plazo.
Crecen las operaciones grises de la Guardia Costera china y aumentan las tensiones en el estrecho de Taiwán
Durante su participación en el foro de seguridad Shangri-La Dialogue, el exministro de Defensa de Taiwán, Andrew Yang, advirtió sobre el creciente empleo de operaciones en zonas grises por parte de China, particularmente el aumento de la actividad de la Guardia Costera en aguas cercanas a la isla. Aunque estas maniobras no constituyen oficialmente actos militares, Yang señaló que transmiten un mensaje claramente militar, lo que complica la capacidad de respuesta de las autoridades taiwanesas.

Yang también expresó su preocupación por la falta de canales oficiales de comunicación entre Pekín y Taipéi desde 2016, cuando el gobierno taiwanés dejó de reconocer el principio de “una sola China”. Desde entonces, los intercambios formales se han mantenido suspendidos, lo cual, según el exfuncionario, incrementa el riesgo de malentendidos y errores de cálculo entre ambas partes. Las tensiones se han intensificado tras la reciente asunción del presidente William Lai, considerado por China como un separatista.
Taiwán refuerza su estrategia nacional para hacer frente a las operaciones de Pekín en zonas grises
Ante el aumento de las operaciones en zonas grises impulsadas por Pekín, Taiwán está implementando una estrategia multifacética que prioriza la resiliencia interna y la disuasión sin escalamiento militar directo. Según un informe del Royal United Services Institute (RUSI), el gobierno taiwanés ha adoptado un enfoque dividido entre respuestas de “gris claro”, orientadas a neutralizar los efectos de las agresiones mediante medidas defensivas y diplomáticas, y acciones de “gris oscuro”, que buscan imponer costos a China sin cruzar el umbral de un conflicto armado.

En paralelo, Taiwán está fortaleciendo sus capacidades institucionales con la creación del Comité para la Resiliencia en la Defensa de Toda la Sociedad, lanzado por en 2024. Esta iniciativa trabaja en la preparación civil, la protección de redes de info+rmación y transporte, y la seguridad de suministros estratégicos y servicios médicos. De acuerdo con el RUSI, Taiwán también promueve una narrativa pública que expone las tácticas coercitivas de China como actos de acoso, con el objetivo de ganar apoyo internacional y sostener la cohesión interna.
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