Altos funcionarios de Irán, Estados Unidos e Israel sostienen que la operación encubierta de la República Islámica iraní busca convertir a Cisjordania en un punto álgido de su enfrentamiento con Israel. El objetivo, como lo describen tres funcionarios iraníes, es fomentar el malestar contra Israel inundando el enclave con tantas armas como sea posible. Recientemente, las tensiones entre ambas naciones llegaron a niveles sin precedentes cuando el 1 de abril, aviones de combate israelíes atacaron una reunión de líderes de las fuerzas armadas de Irán y miembros de la Yihad Islámica Palestina en el anexo de la embajada iraní en Damasco, Siria.
¿Cómo funciona la operación de contrabando iraní?
Para el traslado de las armas, Irán utiliza dos rutas principales en colaboración de militantes aliados y redes militares en las que agentes iraníes de la Fuerza Quds se encargan de la coordinación.
A lo largo de una ruta, las armas son transportadas desde Siria a Jordania, en donde contrabandistas beduinos se encargan de llevar el cargamento hacia la frontera porosa de 300 millas con Israel. Allí, son recogidas por bandas criminales que luego las ingresan a Cisjordania.
La segunda ruta, pasa por alto Jordania y lleva las armas de Siria al Líbano, dijeron dos de los funcionarios estadounidenses en una entrevista exclusiva con The New York Times. Desde allí, muchas de las armas se introducen de contrabando en Israel, donde bandas criminales las recogen y las trasladan a Cisjordania.