Rusia emite una advertencia a Rumania por la construcción de la que se dice será la mayor base militar de la OTAN en Europa. Este proyecto, valuado en 2.500 millones de euros y con un plazo de 20 años, se inició en 2019 y se espera que se termine en 20 años.
La expansión de la base aérea rumana 57 Mihail Kogalniceanu, ubicada en la costa del Mar Negro, ha generado preocupación entre los funcionarios rusos, ya que fortalecería el flanco oriental de la OTAN. Sin embargo, este proyecto se inició antes de la invasión de Ucrania por parte de Rusia en 2022.
Los políticos rusos han expresado su preocupación, calificando el proyecto como una amenaza para Bucarest. Afirman que una base militar tan grande y cerca de las fronteras rusas podría ser un objetivo principal en caso de represalias.
A pesar de las advertencias rusas, Rumania continúa con el desarrollo de la base aérea en Constanza. Este proyecto se considera una continuación de la “erosión” de la seguridad en la región del Mar Negro, según Konstantin Gavrilov, jefe de la delegación rusa en las negociaciones de Viena sobre seguridad militar y control de armamentos.