La Unión Europea ha elevado su voz en medio de la creciente ofensiva en Farah, llamando a una reconsideración de la ayuda militar a Israel en respuesta al elevado número de víctimas civiles en la guerra de Gaza. La petición se suma a las preocupaciones expresadas por el presidente estadounidense, Joe Biden, sobre la respuesta de Israel al ataque de Hamás del 7 de octubre.
El responsable de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, lanzó una sugerencia sobre la situación en Gaza, destacando que si se percibe que hay una masacre y demasiadas vidas civiles en juego, debería haber una revisión en la provisión de armas. Borrell expresó estas opiniones durante una rueda de prensa tras una reunión de ministros de Ayuda al Desarrollo de la UE en Bruselas.
“Si creen que se está matando a demasiada gente, tal vez deberían proporcionar menos armas para evitar que se mate a tantas personas”, declaró Borrell, desencadenando un debate sobre la responsabilidad y la ética en medio del conflicto en Gaza.
El llamamiento de Borrell resuena con las críticas de líderes y funcionarios estadounidenses que han cuestionado la proporcionalidad y la magnitud de la respuesta israelí a los ataques de Hamás. El presidente Biden ya había declarado que la reacción de Israel fue “exagerada”, señalando la pérdida significativa de vidas civiles en Gaza.