En una conferencia de prensa el pasado jueves, el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, expresó preocupación por las decisiones del presidente ruso, Vladimir Putin, sobre su retirada del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) a principios de este año. Principalmente, el funcionario afirmó que Putin ha hecho “el mundo más peligroso”.
Cabe destacar que Putin anunció en febrero que su país iba a dejar el Nuevo Tratado START, a menos que Estados Unidos cambiara su “política fundamentalmente hostil” hacia Moscú. Esto impedía que Estados Unidos y la OTAN inspeccionaran las instalaciones nucleares de Moscú, y promovió que Estados Unidos tomara la decisión de tampoco compartir información solicitada un mes después.
Stoltenberg también destacó que se trata de un patrón de comportamiento imprudente de Rusia al abandonar cada tratado importante de control de armas. También lo responsabilizó por la terminación del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) entre Washington y Moscú en 2019, y citó otro ejemplo aún más reciente: el abandono del Tratado sobre Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE).
Al respecto, puntualizó en que Rusia “continúa socavando la seguridad en Europa” y que, a pesar de las llamadas a la responsabilidad, Moscú revocó su ratificación del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT). Cabe destacar que en octubre, la Duma Estatal votó por unanimidad para retirar la ratificación de este tratado que prohíbe “cualquier explosión de prueba de armas nucleares”.