Durante este miércoles, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, supervisó maniobras de las fuerzas nucleares estratégicas con el lanzamiento de misiles balísticos y de crucero en un acto que pretende demostrar fuerza en medio de las crecientes tensiones con Occidente por el conflicto en Ucrania. Sumado a la denuncia que lanzó recientemente Putin sobre el uso de “bombas sucias” por parte del gobierno de Zelenski.
El ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, informó al líder del Kremlin, quien se encontraba presenciando el acto por videoconferencia, que el ejercicio tenía la intención de simular un “ataque nuclear masivo” por parte de Rusia en represalias por algún ataque nuclear contra el país. En este sentido, los disparos se realizaron en el contexto de las maniobras conocidas como “Grom” (Trueno) y duraron apenas unos minutos.
Los simulacros de este miércoles, involucraron el lanzamiento de prueba de un misil balístico intercontinental terrestre Yars desde el norte de Plesetsk, junto con el lanzamiento de un misil balístico intercontinental Sineva por un submarino nuclear ruso en el Mar de Barents, que se encuentra a sólo diez millas de distancia de las costas del miembro de la OTAN, Noruega. .
Fuente: Ministerio de Defensa ruso
Posterior a esto, Putin volvió a dirigirse a todo el mundo afirmando que el riesgo de un conflicto global que amenace al antiguo espacio soviético continua siendo muy alto. Continuó “están apareciendo nuevos riesgos y desafíos para la seguridad colectiva, principalmente como resultado del fuerte agravamiento de la confrontación geopolítica internacional”.