Aunque Hamas no se atribuyó la responsabilidad por el cohete hacia Israel, advirtió que respondería a la redada. Esto causó preocupación en la región y, principalmente, en Estados Unidos.
Las fuerzas israelíes asaltan la mezquita de Al-Aqsa después de las oraciones de la mañana el 18 de abril de 2022. Fuente: Al Jazeera
Las posibilidades de una nueva escalada de tensiones como las ocurridas en mayo del año pasado preocupan severamente al gobierno de Joe Biden, debido a que podría desencadenar en una nueva “ronda de violencia”.
Imágenes del conflicto entre Israel y Hamas en el 2021. fuente: BBC
Se espera que el subsecretario de Estado interino para Asuntos del Cercano Oriente, Yael Lempert, y el subsecretario adjunto, Hady Amr, sean los principales cargos que lleguen a la región.
Asimismo, el secretario de Estado, Antony Blinken, conversó telefónicamente el lunes y martes pasado con el ministro de Relaciones Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, el ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, y el presidente palestino, Mahmoud Abbas.
Blinken hizo hincapié en la necesidad de reducir la tensión en la situación en Jerusalén. Con Safadi discutió la importancia de que israelíes y palestinos trabajen en conjunto para “poner fin al ciclo de violencia”, y enfatizó en la necesidad de “mantener el status quo histórico en el Monte del Templo”.