La semana pasada, en una base aérea de California, se observó un avión de combate alemán de la OTAN transportando un entrenador de bombas de gravedad nuclear, desarrollado en Estados Unidos. Este avión, un “Tornado” de la fuerza aérea alemana, es uno de los pocos aviones no estadounidenses certificados para operar bajo el programa nuclear compartido de la OTAN en Europa.
Estos aviones, que pueden llevar tanto armas nucleares como no nucleares, están capacitados para lanzar bombas nucleares estadounidenses en caso de conflicto. La OTAN confirmó que EE. UU. ha desplegado una cantidad “limitada” de bombas nucleares B61 en Europa como parte de su disuasión extendida, conocida como “paraguas nuclear”. Estas armas, bajo control estadounidense, garantizan la seguridad de la alianza. El despliegue de estas armas en Europa refuerza la capacidad nuclear de la OTAN para disuadir posibles agresiones.
En marzo, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional de EE. UU. advirtió sobre el crecimiento del arsenal nuclear ruso como medio de disuasión. Una foto tomada el 27 de agosto en la Base Aérea Edwards, en California, muestra un avión alemán transportando un entrenador de la bomba nuclear B61-12, según Hans Kristensen, director del Proyecto de Información Nuclear de la Federación de Científicos Estadounidenses.
El B61-12, diseñado para durar al menos dos décadas, reemplazará a todas las bombas nucleares estadounidenses en Europa en los próximos años. Gracias a un kit de cola guiada, la bomba puede alcanzar objetivos con mayor precisión y con rendimientos menores, lo que reduce los daños colaterales. La Administración Nacional de Seguridad Nuclear de EE. UU. informó en noviembre que el B61-12 está certificado para el bombardero B-2 “Spirit” y que aviones de la OTAN, como el “Tornado”, están autorizados para llevar versiones anteriores del B61.
El “Tornado” no es el primer avión no estadounidense en entrenarse con el B61-12. En diciembre pasado, Kristensen señaló que los Países Bajos, uno de los cinco países que almacenan armas nucleares estadounidenses, habían realizado ejercicios con la nueva bomba nuclear. En 2021, se observó un F-16 holandés con un entrenador B61-12 en la base aérea de Volkel. Esto ocurrió antes de que la bomba entrara en producción en 2022. El 1 de junio, la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos se convirtió en la primera en Europa en cambiar de avión para su función nuclear, reemplazando el “Fighting Falcon” con el “Lightning II” para contribuir a la disuasión nuclear de la OTAN.
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Fuente: Miami Herald