Un intento por parte del ejército de Estados Unidos de proporcionar ayuda humanitaria tan necesaria a los palestinos en la Franja de Gaza comenzó de manera caótica. Hubo incidentes donde camiones de ayuda fueron asaltados, y existe preocupación por la posibilidad de que al menos una persona haya perdido la vida durante el fin de semana, lo que resultó en una suspensión temporal de la distribución de ayuda.
El plan, anunciado por el presidente Biden durante su discurso sobre el Estado de la Unión, se basa en la capacidad logística conjunta Over-the-Shore (JLOTS) y se presentó como un medio adicional para llevar alimentos a los habitantes de Gaza, quienes se encuentran atrapados entre el ejército israelí y el grupo militante palestino Hamás, que atacó a Israel el 7 de octubre.
Este esfuerzo no implica la presencia de tropas estadounidenses en Gaza, ya que su participación se limita a la construcción de la plataforma flotante y el muelle instalados la semana pasada. Sin embargo, la distribución de ayuda se detuvo temporalmente el sábado pasado y se reanudó el martes, según el Pentágono. Aunque la ONU indicó que no tenía conocimiento de ninguna entrega ese mismo martes.
Detalles del incidente
De los 16 camiones que salieron del área segura el sábado, solo cinco llegaron al almacén previsto con su carga intacta, mientras que los otros 11 fueron asaltados en el camino, según Steve Taravella, portavoz del Programa Mundial de Alimentos de la ONU.