El éxito económico del gobierno de Milei, y por consiguiente una rápida salida de la recesión, está sustentado en una buena cosecha agrícola 2023/2024. Para ello, un factor crucial son los precios internacionales de las commodities agrícolas. Durante los años 2020-2023 los precios de las principales commodities (soja, maíz, trigo) se movieron al alza, superando los 600 dólares en la Bolsa de Chicago (CBOT), uno de los precios de referencia a nivel internacional. Durante los últimos meses, el movimiento de los precios fue en el sentido contrario.
En un principio, la cosecha argentina aparentaba ser histórica. Pero las lluvias, y luego un periodo de sequía durante enero, afectaron los rindes de las mismas. Esto cambió la perspectiva, donde se evalúa incluso solicitar un nuevo programa y desembolso con el Fondo Monetario Internacional. Es muy probable que el Ministro de Economía Caputo asista a la Cumbre del Fondo Monetario Internacional a realizarse en durante el mes de abril y se traten ambos temas.
Parte de la reducción de los precios internacionales se explica en la baja de las zonas desérticas en EE.UU.. Esto hace que mayor cantidad de hectáreas sean utilizadas para siembra y aumenten la oferta, moviendo el precio a la baja. Además, en el “Panorama de Granos y Semillas Oleaginosas” del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos se estima desde la USDA que la cosecha 24/25 podría incluir mayor cantidad de hectáreas para siembra. El uso de la soja como materia prima para la producción de biodiesel también influye en las proyecciones bajistas del precio de la commodity.
La situación en Brasil es similar. A finales de 2023 e inicios del 2024 hubo incertidumbre respecto a la sequía. Pero mejoró la perspectiva en la siembra de soja. En el inicio de la siembra, la Compañía Nacional de Abastecimiento de Brasil (CONAB) estimó que producirían 162 millones de toneladas de soja, pero actualmente las previsiones son de 146,9 millones de toneladas.
Plantar soja es la garantía de continuar en la pobreza.
El campo se tiene que dedicar a productos con valor agregado. Vinos, fiambres, quesos, etc.