El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció este miércoles el despliegue de tropas y sistemas de armamento a lo largo de la frontera con Finlandia, en represalia por la decisión de Helsinki de ingresar a la OTAN en abril pasado. En una entrevista, Putin lamentó que Rusia y Finlandia hayan pasado de mantener una “relación ideal” a la necesidad de reforzar militarmente sus límites fronterizos tras la adhesión finlandesa a la alianza militar occidental.
“En general, teníamos unas relaciones ideales con Finlandia. Sencillamente perfectas. No teníamos ni una sola reclamación mutua, sobre todo territorial, por no hablar de otros ámbitos. Ni siquiera teníamos tropas; retiramos todas las tropas de allí, de la frontera ruso-finlandesa”, expresó el mandatario ruso.
Si bien Moscú ya había comenzado a equipar bases militares cerca de la frontera finlandesa en agosto pasado, según informó el canal de televisión finlandés Yle, el anuncio de Putin confirma la decisión de reforzar su presencia militar en esa zona del Ártico ruso.
De acuerdo con Yle, se han construido grandes hangares para equipos militares en la base aérea de Alakurtti, en la región de Murmansk, y en un depósito militar en Petrozavodsk, en el noroeste de Rusia, visible en imágenes de satélite. Aunque gran parte de ese material ha sido redirigido a la guerra en Ucrania, los analistas consideran que los hangares se construyeron para reabastecer y enviar suministros al frente ucraniano.