Recientemente, el medio Times señaló que las naciones europeas y la alianza militar de la OTAN se estarían preparando para una futura guerra con Rusia, ya que ya no lo ven cómo algo imposible. Todo ello sumado a que las encuestas dan como candidato ganador en las presidenciales de Estados Unidos a Donald Trump, y el apoyo del país a Ucrania se encuentra desmoronado.
En ese sentido, se destaca la creciente preocupación en Europa sobre la posibilidad de que Rusia, bajo la dirección del presidente Vladímir Putin, pueda invadir una nación miembro de la OTAN en la próxima década.
Esto se debe a los últimos acontecimientos de ocupación rusa, cómo Abjasia y Osetia del Sur en 2008, la anexión de Crimea en 2014 y la invasión total de Ucrania en 2022, que ponen sobre la mesa la preocupación de las naciones europeas ante eventos similares en el futuro.
Por otro lado, la incertidumbre del liderazgo en EE. UU. amenaza con el regreso del expresidente Donald Trump, genera inquietud sobre el apoyo de EE. UU. a sus aliados de la OTAN. Sin embargo, el texto menciona la débil preparación militar de algunos países de la alianza militar y la necesidad de fortalecer este punto ante una posible amenaza rusa.