La Embajada de Estados Unidos en Haití ha emitido un comunicado instando a los ciudadanos estadounidenses presentes en el país a abandonar la nación “tan pronto como sea posible”, debido a la persistente agitación política y disturbios.

En el aviso publicado el miércoles, la embajada señaló que, debido a la actual situación de seguridad y a los desafíos infraestructurales, es recomendable que los ciudadanos estadounidenses en Haití salgan del país utilizando medios de transporte comerciales o privados, preferiblemente. Además, se les advierte que, mientras permanezcan en Haití, deben tener “extrema precaución” al desplazarse por el país y evitar unirse a manifestaciones o grandes grupos de personas.

La embajada también agregó la recomendación de que, si se encuentran con controles de carretera, den la vuelta y busquen un lugar seguro.

El mes pasado, Estados Unidos procedió a evacuar al personal gubernamental que no estaba en servicio de emergencia, junto con los familiares de los diplomáticos de la embajada en Puerto Príncipe, la capital y ciudad más poblada del país. Esta medida fue tomada después de que una gran cantidad de haitianos se congregaran cerca de la embajada estadounidense buscando protección debido a los intensos enfrentamientos armados en las cercanías del complejo.

La gente de Puerto Príncipe, Haití, sale a las calles el 14 de agosto para protestar por la inseguridad que han sufrido debido a la presencia de bandas armadas. Posteriormente, la policía dispersó a los manifestantes con gases lacrimógenos. (Johnson Sabin/EPA-EFE/Shutterstock)

Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021, Haití ha estado experimentando un aumento en la violencia perpetrada por pandillas. Después de ese suceso, grupos armados de pandilleros han logrado tomar el control de hasta el 90 por ciento de la ciudad de Puerto Príncipe, según informó The Washington Post. Estos grupos han sido responsables de asesinatos, violaciones y desplazamientos masivos de civiles, en medio de una lucha por el dominio territorial y los recursos.

En octubre del año pasado, el primer ministro Ariel Henry, quien asumió tras la muerte de Moïse, solicitó la intervención de una fuerza multinacional armada para enfrentar la crisis. Sin embargo, esta petición en su mayoría ha quedado sin respuesta. Estados Unidos transfirió el liderazgo de esta fuerza a Canadá, aunque este último país también ha mostrado reticencia. En respuesta, los civiles en Haití han organizado grupos de vigilantes armados para enfrentar a las pandillas.

El mes pasado, Kenia manifestó su disposición a liderar una fuerza multinacional con el objetivo de devolver el control a las autoridades haitianas.

En el aviso dirigido a los ciudadanos estadounidenses en Haití el miércoles, la embajada enfatizó que los asientos en los vuelos se llenan rápidamente y podrían estar disponibles solo unos días o semanas antes de la fecha de partida. Se mencionó que aerolíneas como American Airlines, JetBlue y Spirit operan en Haití, así como la aerolínea nacional Sunrise Airways.

La disponibilidad de vuelos durante esta semana fue sumamente limitada, con boletos de American Airlines para el 6 de septiembre con un costo cercano a los 2,000 dólares.

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Redacción
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