La Cámara de Representantes se disolvió el pasado 14 de octubre al final de la sesión extraordinaria de la Dieta. Por lo cual, el Gobierno japonés, a cargo del primer ministro Fumio Kushida, decidió en una posterior reunión extraordinaria del Gabinete celebrar las elecciones a la Cámara Baja con el anuncio oficial en el 19 de octubre y la votación para el 31 del mismo mes, dando así comienzo a la campaña electoral.

Así, la elección de la 49º la Cámara de Representantes del próximo domingo se convirtió en la batalla decisiva a corto plazo más breve después de la guerra, con 17 días desde la disolución de la Cámara hasta el recuento de votos. Por lo cual, la campaña electoral, que comenzó con la decisión tomada sobre la Cámara el día 14, ha entrado en la “segunda mitad del juego“, menos de una semana antes del escrutinio del día 31.

De este modo, en las próximas elecciones generales, la coalición gobernante, formada por el Partido Liberal Democrático y el Nuevo Kōmeitō, tratará de retener el poder. Por otro lado, las fuerzas de la oposición, lideradas por el Partido Democrático Constitucional, intentarán dar un giro a la política nacional. En total, compiten por 465 bancas en 289 distritos electorales de un solo escaño y 176 representaciones proporcionales.

Asimismo, es importante mencionar que la elección de la Cámara de Representantes será la primera en cuatro años desde octubre de 2017. El mandato de los ex miembros de la cámara baja es hasta el 21 del mes pasado. Por lo cual, será la primera vez, según la constitución actual, que la fecha de recuento de votos se alcanzará después del vencimiento del mandato. 

Entre los temas principales en estos comicios serán las medidas contra el coronavirus y las políticas económicas. Además, un factor que agrega importancia a esta ocasión es que los partidos de la oposición han unido a sus candidatos en más de 200 de las 289 circunscripciones con un solo escaño.

El actual primer ministro, Fumio Kishida, ha fijado la línea ganadora y perdedora en 233 bancas, que es la mayoría del partido gobernante. La idea es ganar confianza en la administración que acaba de lanzarse como una “elección futura“. 

Los votantes deben tener al menos 18 años y la nacionalidad japonesa. Votan en el municipio (ciudad, pueblo o aldea) donde está registrada su residencia. Por regla general, el horario de votación es de las 7:00 a las 20:00 horas, y el recuento de los votos se realiza el mismo día.

También, en la antesala del 31 de octubre, el domingo pasado se han llevado adelante las elecciones parciales al Senado. En ese marco, las proyecciones apuntan a que Shinnosuke Yamazaki, apoyado por la oposición, se ha impuesto en la prefectura de Shizuoka tras derrotar al candidato del Partido Democrático Liberal de Kishida.

Primer revés: los resultados parciales en el Senado

En el anticipo a las elecciones del 31 de octubre, el partido del nuevo primer ministro japonés, Fumio Kishida, ha recibido este domingo un duro golpe. Ello ha sido producto los resultados de las elecciones parciales al Senado en las que la oposición ha logrado hacerse con uno de los dos escaños en juego.

Estos comicios se celebraron debido a la renuncia de dos legisladores del PLD, representantes de los distritos electorales de Yamaguchi y Shizuoka, respectivamente. Despertaron interés como barómetro del electorado, a apenas una semana de las elecciones de la Cámara Baja del 31 de octubre.

En el distrito electoral de Shizuoka, un candidato independiente, Yamazaki Shinnosuke, se impuso con 650.789 votos. Derrotó a Wakabayashi Yohei, del PLD, quien recibió 602.780 sufragios.

En el distrito electoral de Yamaguchi, Kitamura Tsuneo ganó la elección parcial con 307.894 votos. Es un exlegislador del PLD y presentó su candidatura con el respaldo del Partido Komei, también perteneciente a la coalición oficialista. Derrotó a Kawai Kiyo, del Partido Comunista, quien obtuvo 92.532 votos.

La disputa de las candidaturas

El representante de Komeito, Natsuo Yamaguchi, se ha fijado el objetivo lograr 9 escaños en la circunscripción de un solo escaño. A ello le añadió 8 millones de votos proporcionales, con la meta de obtener la mayoría junto con el Partido Liberal Democrático.

Yukio Edano, representante del Partido Demócrata Constitucional, se inclina por un cambio de gobierno. En ese marco, el Partido Demócrata Constitucional, el Partido Demócrata para el Pueblo, el Reiwa Shinsengumi y los cinco partidos de oposición del Partido Socialdemócrata tienen candidatos unificados en alrededor de 210. Ello representa más del 70% de los distritos electorales uninominales.

De este modo, el Partido Democrático Constitucional de Japón y el Partido Comunista de Japón han coordinado sus esfuerzos para “unificar” sus candidatos en muchas circunscripciones con el fin de evitar que los dos partidos se hundan debido a la dispersión de votos. Con la excepción del Nippon Ishin no Kai, se espera que los cuatro partidos principales de oposición creen una estructura de enfrentamiento entre la coalición gobernante y la oposición “uno a uno” en más de 200 circunscripciones.

De este modo, el Nippon Ishin no Kai, dirigido por el alcalde de Osaka, Ichiro Matsui, tiene como objetivo aumentar el número de escaños principalmente en la región de Kansai. 

En cuanto a las medidas contra la nueva corona, cada parte se ha comprometido a ampliar la vacunación y las pruebas. Los partidos gobernantes y de oposición han proporcionado una serie de medidas de apoyo, como pagos en efectivo, diciendo que el impacto económico de las medidas de control de infecciones aún es grande.

La representación de las mujeres, un tema pendiente

En total, 186 mujeres se postularon para las elecciones de la Cámara de Representantes esta vez, lo que representa el 17,7% de todos los candidatos. Hay que tener en cuenta que la proporción de mujeres miembros de la Cámara de Representantes en Japón es de alrededor del 10%, que es el nivel más bajo en los países desarrollados

Aunque entre 1995 y 2019 se produjo un avance en el porcentaje de mujeres en los parlamentos de todo el mundo, pasando de una media del 11,3 % al 24,3 %, Japón aún no alcanza el promedio mundial de mediados de la década de 1990.En ese sentido, en el 2018, Parlamento japonés aprobó una ley diseñada para ayudar a las mujeres a acceder más fácilmente a cargos políticos nacionales y regionales. La normativa es una herramienta esperanzadora ante una perduración de abrumadora representación masculina, aunque no es vinculante. Lo sustancial es que insta a las formaciones políticas a contar con un número similar de varones y mujeres en sus filas y a establecer objetivos numéricos de paridad de género, entre otras medidas.

Te puede interesar: Preocupación desde Japón por el ejercicio naval conjunto entre China y Rusia

Dejá tu comentario