Se dispararon las alarmas de la región y de los países cuando las fuerzas armadas de Kirguistán y Tayikistán se enfrentaron este jueves a lo largo de la frontera entre ambos países, en una escalada de tensiones tras choques a pedradas entre residentes de ambos lados registrados el miércoles, en medio de una disputa por el uso de una estación de bombeo en una reserva de agua.
Suelen ser usuales los conflictos menores entre las partes. Sin embargo, esta vez la situación escaló cuando los guardias abrieron fuego. Un puesto fronterizo de Kirguistán se incendió tras el ataque de un mortero tayiko, lo que derivó en el avance de las fuerzas kirguisas, que capturaron un puesto tayiko de avanzada.
Kirguistán denunció que su vecino atacó este jueves cinco de sus puestos fronterizos. “A las 14.05 hora local (09.05 GMT) en la localidad Golovnói comenzó un tiroteo entre unidades militares de las partes, en el curso del cual fueron heridos civiles y soldados de Kirguistán”, señaló en un comunicado el Servicio de Fronteras del Comité Estatal de Seguridad Nacional (CESN).
Cientos de personas debieron ser evacuadas de las aldeas adyacentes, ante el riesgo de que los enfrentamientos subieran aún más de nivel. Rápidamente, los ministros de Exteriores de Tayikistán y Kirguistán se pusieron en contacto, y después de algunas horas de conversaciones acordaron un cese de las hostilidades. Para evitar nuevos problemas, las fuerzas de seguridad serán replegadas y se iniciarán conversaciones para evitar futuros inconvenientes.