Al menos unas 75 personas murieron en el marco de una ola de violencia en varias cárceles del país y que según autoridades responden a enfrentamientos de bandas criminales que se financian del narcotráfico.
Los incidentes se registraron en cárceles de las provincias de Guayas y Cotopaxi, además de la prisión de Turi, en la provincia de Azuay. En esos 3 centros se encuentra el 70% de toda la población penitenciaria de Ecuador.
En rueda de prensa, el director del Servicio Nacional de Atención Integral a las Personas Privadas de Libertad (SNAI), Edmundo Moncayo, informó que, además de las 33 víctimas mortales en el centro de Turi, 8 reclusos murieron en el de Latacunga (Cotopaxi) y 21 en el de Guayaquil (Guayas). Más tarde las autoridades informaron que en Guayas se produjeron 13 nuevos asesinatos, por lo que la cifra total de fallecidos aumentó a 75.
Moncayo atribuyó los motines al choque entre organizaciones delictivas por tomar el liderazgo que quedó vacante tras el asesinato de un ciudadano en la ciudad de Manta el pasado diciembre.