A la hora de preguntar sobre la preferencia del gigante asiático respecto a un segundo mandato de Joe Bien o Donald Trump, expertos sostienen que Pekín optaría por la continuidad con el demócrata. Evitando enfrentarse a la amenaza de aranceles de hasta el 60% sobre los productos chinos, planteada por Trump.
La contención del ascenso de China fue una de las principales promesas electorales de Donald Trump en 2016. Refiriéndose a las prácticas comerciales consideradas desleales por parte de Pekín, tales como el dumping, la obstrucción al acceso al mercado chino y la apropiación no autorizada de propiedad intelectual, Trump prometió aplicar aranceles a China.
En 2021, pese a las expectativas de la administración de Joe Biden de deshacer las políticas de Trump, los aranceles se mantuvieron e incluso aumentaron en su mayoría. Posteriormente, el embargo de chips anunciado por Biden en 2022 – que se extendió a los chips de inteligencia artificial – impidió la venta de estos semiconductores a China.
Sin embargo, Michele Geraci, profesor de Finanzas de la NYU, advirtió que el embargo de chips es contraproducente, ya que impulsó a China a desarrollar su propia capacidad de producción. Además, explica que esto podría reducir la brecha en el diseño de chips avanzados y que Estados Unidos perderá un mercado clave.