Un conjunto de destacadas organizaciones humanitarias, entre las que se incluyen Amnistía Internacional y Human Rights Watch, ha dirigido una carta al secretario de Defensa, Lloyd Austin, en la que solicitan la suspensión de la ayuda militar y de otro tipo a Israel.
La petición se fundamenta en las operaciones llevadas a cabo por Israel en Gaza, las cuales, según argumentan, han ocasionado daños civiles asombrosos. La misiva, también enviada al secretario de Estado Antony Blinken y al asesor de seguridad nacional Jake Sullivan, insta a Austin a retener la asistencia estadounidense que, según afirman, podría facilitar violaciones del derecho internacional humanitario.
En la carta, los grupos, que incluyen a Airwars, Anera, Center for Civilians in Conflict, Humanity & Inclusion, InterAction, Médicos Sin Fronteras EE.UU., Consejo Noruego para Refugiados EE.UU., Oxfam América, PAX, Refugees International, Save the Children EE.UU. y Zomia Center, expresan su preocupación por la respuesta del Departamento de Defensa ante el devastador daño en Gaza. Argumentan que dicha respuesta no ha cumplido con los compromisos establecidos en el Plan de Acción de Respuesta y Mitigación de Daños Civiles (CHMR-AP) y que ha socavado activamente esos compromisos.
Los grupos destacan que Estados Unidos es el mayor proveedor de armas y asistencia de seguridad a Israel, aportando anualmente 3.800 millones de dólares. En este sentido, sostienen que existe una responsabilidad por parte de Estados Unidos de garantizar que la asistencia no contribuya a violaciones de derechos humanos. Además, subrayan que, según la política de transferencia de armas convencionales del presidente Joe Biden, Washington no debería enviar armas cuando exista una evaluación de que es “más probable que no” se utilicen para violar los derechos humanos.