El pasado diciembre, el ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, declaró que el ejército ruso debía ampliarse aún más, además de aumentar el límite de edad de reclutamiento y aumentar el número de militares contratados. En este contexto, recientemente Putin ordenó que las Fuerzas Armadas del país debían aumentar a 1.5 millones en los próximos tres años, además de crear un cuerpo de ejército y dos distritos militares en su frontera con Finlandia.
La agencias de noticias estatales rusas RIA Novosti y RBK citaron los dichos de Shoigu, afirmando que “el presidente de la Federación Rusa ha tomado la decisión de aumentar el número de militares en las Fuerzas Armadas a 1,5 millones” con el objetivo de “garantizar la seguridad militar del Estado, la protección de los nuevos sujetos federales y las instalaciones críticas de la Federación Rusa”, ya que “solo puede garantizarse mediante el fortalecimiento de los componentes estructurales clave de las Fuerzas Armadas”.
El objetivo de aumentar el número de militares junto a otros “cambios a gran escala” en las Fuerzas Armadas se buscará llevar a cabo durante 2023-2026. Asimismo, otros objetivos son crear dos nuevas asociaciones territoriales estratégicas entre servicios: los distritos militares de Moscú y Leningrado, y formar un cuerpo de ejército en Karelia. Asimismo, Rusia busca crear dos nuevas brigadas en divisiones de infantería motorizada, además de fortalecer el componente de combate de la Armada, la Fuerza Aérea y las Fuerzas de Cohetes Estratégicos.
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