Irán no ha explicado los restos de uranio encontrados en varios sitios no declarados, según un informe del organismo de control nuclear de la ONU publicado el lunes, lo que podría desencadenar un nuevo enfrentamiento diplomático entre Teherán y Occidente que podría hacer fracasar unas conversaciones nucleares más amplias.

Hace tres meses, Gran Bretaña, Francia y Alemania desecharon un plan respaldado por Estados Unidos para que la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), integrada por 35 países, criticara a Irán por no explicar plenamente el origen de las partículas; los tres dieron marcha atrás cuando el jefe del OIEA, Rafael Grossi, anunció nuevas conversaciones con Irán.

“Después de muchos meses, Irán no ha dado las explicaciones necesarias sobre la presencia de las partículas de material nuclear en ninguno de los tres lugares en los que el Organismo ha realizado accesos (inspecciones) complementarios”, decía un informe de Grossi a los Estados miembros visto por Reuters.

Ahora dependerá de las tres potencias europeas decidir si reanudan su impulso para una resolución que critique a Irán, lo que podría socavar las negociaciones más amplias para revivir el acuerdo nuclear iraní de 2015 en las conversaciones actualmente en curso en Viena. Grossi esperaba informar de los avances antes de que la junta se reuniera de nuevo la semana que viene.

“Al director general le preocupa que las discusiones técnicas entre el Organismo e Irán no hayan dado los resultados esperados”, decía el informe.

“La falta de progresos en la aclaración de las cuestiones del Organismo relativas a la corrección y exhaustividad de las declaraciones de salvaguardias de Irán afecta gravemente a la capacidad del Organismo para ofrecer garantías sobre la naturaleza pacífica del programa nuclear de Irán”, añadía.

En un informe trimestral separado, también enviado a los Estados miembros el lunes y visto por Reuters, la agencia dio una indicación del daño hecho a la producción de uranio enriquecido de Irán por una explosión y un corte de energía en su sitio de Natanz el mes pasado que Teherán ha culpado a Israel.

El aumento trimestral de Irán en sus existencias de uranio enriquecido fue el más bajo desde agosto de 2019, con apenas 273 kg, lo que eleva el total a 3.241 kg, según una estimación del OIEA. No pudo verificar completamente las existencias porque Irán ha rebajado la cooperación.

Ese total es muchas veces el límite de 202,8 kg establecido por el acuerdo nuclear, pero todavía está muy por debajo de las más de seis toneladas que Irán poseía antes del acuerdo.

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Redacción
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