En despachos confidenciales del Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño, citados desde Defensanet, se empezó a hablar de “Operación Imeri” – nombre inspirado en la cordillera entre Brasil y Venezuela -, el plan para rescatar clandestinamente a Nicolás Maduro. La operación se originó como respuesta al reciente cerco militar estadounidense en el Caribe, cuando Washington desplegó tres destructores y unos 4.000 soldados, bajo una versión oficial de lucha contra el narcotráfico, pero con implicaciones geopolíticas amplias.

En este sentido, la información revela que durante la cumbre de la OTCA en Bogotá (21–22 de agosto de 2025), el canciller brasileño, Mauro Vieira, y su contraparte de Venezuela, Yván Gil, mantuvieron conversaciones oficiales sobre frontera e integración. No obstante, en paralelo y bajo mediación militar, se discutieron los términos de un rescate discreta de Maduro hacia Brasil, antes de que fuerzas del Comando Sur o grupos armados lo detuvieran.
Dicho plan contemplaba dos posibles vías: una operación naval con doce unidades de la Armada brasileña —que incluiría el portahelicópteros Atlántico, fragatas clase Niterói y el buque-doca Bahía— junto a unidades de élite para asegurar un corredor marítimo de evacuación. La segunda alternativa involucraba una infiltración aérea usando un KC-390, que aterrizaría, extrayendo a Maduro en minutos y regresando a Boa Vista bajo pretexto de un ejercicio humanitario.

Legalmente, el Ejecutivo brasileño procuraría justificar la operación como un ejercicio militar combinado, evitando la intervención del Congreso gracias a facultades presidenciales y decretos vigentes. Sin embargo, Estados Unidos ya rastreaba estos movimientos y advirtió que impondría sanciones económicas y diplomáticas si Brasil seguía adelante con el plan.
Las maniobras militares recientes —vuelos de entrenamiento en las bases de Anápolis y Campo Grande, despliegue de blindados en Boa Vista y refuerzos logísticos en Pacaraima— coinciden con lo que sería la etapa de ejecución de esta operación clandestina, en el marco denominado Operación Atlas.
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