Recientemente, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, reiteró que la doctrina nuclear de Rusia “sigue vigente”, días después de que el presidente Donald Trump anunciara que Estados Unidos y los aliados de la OTAN suministrarán armas “avanzadas” a Ucrania. Las declaraciones de Peskov surgieron este miércoles durante una rueda de prensa, donde añadió que, en consecuencia, “todas las disposiciones (de la doctrina nuclear) continúan aplicándose”.

La doctrina nuclear de Rusia, entre otras medidas, establece que una “agresión” al país o a sus aliados “por parte de cualquier Estado no nuclear con la participación o el apoyo de un Estado nuclear se considera como su ataque conjunto”. Tal postura fue actualizada por el presidente ruso, Vladimir Putin, el pasado diciembre, la cual incluye que Moscú “se reserva el derecho a emplear armas nucleares” en respuesta a armas nucleares u “otros tipos de armas de destrucción masiva” contra sí misma o sus aliados.
Sobre la doctrina nuclear rusa
En sí misma, la actualización de la doctrina nuclear rusa redujo el umbral para participar en la disuasión nuclear. Ratifica una postura estrictamente defensiva, aunque contundente, donde la disuasión está garantizada permanentemente, pero puede activarse no sólo ante ataques nucleares, sino también frente a amenazas convencionales graves.
El poder de decisión está completamente centralizado en la figura del presidente. Según el documento “Fundamentos de la política estatal de la Federación Rusa en materia de disuasión nuclear”, publicado por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, subraya la capacidad de infligir represalias devastadoras si se pone en riesgo su integridad o la de sus aliados estratégicos.

Entre sus principios generales se destaca también el empleo de las armas nucleares como último recurso, aunque necesarias para proteger la soberanía y evitar la escalada de conflictos. A grandes rasgos, la esencial de la disuasión nuclear rusa recae en que está dirigida contra Estados o coaliciones que la consideren adversaria y posean armas de destrucción masiva o fuerzas convencionales significativas. Que si un Estado miembro de una alianza agrede a Rusia, se considera una agresión colectiva del bloque entero, y que la agresión de un Estado no nuclear con apoyo de una potencia nuclear también se interpreta como una agresión conjunta.
Algunos de los riesgos militares considerados relevantes para Rusia, que pueden evolucionar hacia amenazas y activar la disuasión nuclear, son la tenencia de armas nucleares y sus vectores; el desarrollo de misiles de precisión, hipersónicos, drones armados, armas de energía dirigida; la acumulación de fuerzas en zonas adyacentes a Rusia o sus aliados; el despliegue nuclear en Estados no nucleares; los ataques contra infraestructuras críticas o instalaciones peligrosas, entre otros.
Entre las amenazas nucleares y las conversaciones de alto el fuego
Más allá de la actualización de la doctrina nuclear, desde el inicio del conflicto ruso ucraniano existieron múltiples temores de escalada del conflicto al punto nuclear. Principalmente porque las tensiones entre Rusia y los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se han recrudecido, y Moscú posee el mayor arsenal de ojivas nucleares del mundo .A ello se suma que los comentarios de Peskov surgen días después de que Trump declarara en la Casa Blanca que Estados Unidos fabricaría “armas de alta gama” y que serían enviadas a la OTAN.
Por el momento, las tensiones no han empeorado hasta llegar a la amenaza nuclear, gracias principalmente a los múltiples esfuerzos realizados para alcanzar un alto el fuego entre Rusia y Ucrania. Sobre este punto, y en la misma rueda de prensa, Peskov pidió a Estados Unidos que anime a Ucrania a reanudar las negociaciones de paz con Rusia.
Según el medio Tass, declaró que “los principales esfuerzos mediadores provienen de Estados Unidos: el presidente Trump y su equipo. Se han hecho muchas declaraciones, se han expresado muchas expresiones de decepción, pero sin duda esperamos que también haya presión sobre la parte ucraniana”. Además, afirmó que las conversaciones entre Putin y Trump “podrían organizarse muy rápidamente”, pero señaló que no hay planes confirmados.
Te puede interesar: Rusia lanza un ataque masivo con drones y Ucrania responde con un ciberataque a una empresa rusa fabricante de drones













