Un drone Samad-3 lanzado por las fuerzas hutíes en Yemen impactó hace unas horas contra un edificio residencial en la ciudad de Tel Aviv. El sorpresivo ataque, que ocasionó un fallecido y ocho heridos, está siendo investigado por las Fuerzas de Defensa de Israel ya que el vehículo aéreo no tripulado fue detectado pero no se elevaron alarmas ni se tomaron medidas para su derribo.
Conforme a lo expuesto por el portavoz RAdm. Daniel Hagari sobre el ataque con UAV perpetrado hoy en Tel Aviv, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) están analizando paso a paso como se fueron dando los hechos a los fines de determinar las razones de porqué no se activó el sistema de defensa que hubiera dado alarma a la población y permitido el derribo del drone hutí. El reciente ataque es considerado como una notable falla en el sistema defensivo de Israel, ya que el vehículo aéreo no tripulado logró atravesar las distintas capas de protección y alcanzar una de las ciudades más importantes del país.
Autoridades locales también mencionaron que el vehículo aéreo no tripulado ingresó a territorio israelí desde el oeste, en dirección al mar. Los restos del drone hallados tras el ataque fue inicialmente identificado como un Samad-3, modelo fabricado por Irán y entregado a las fuerzas hutíes. El portavoz de las FDI aclaró que no es un drone “stealth”, pero se podría tratar de una nueva versión a la cual se le realizaron modificaciones para extender su rango de ataque.
Por su parte, el portavoz hutí Yahya Sare’e reivindicó la autoría del ataque en un comunicado publicado en la red social X. El ataque forma parte de la campaña de represalia de los hutíes por la invasión de Israel a Gaza y por los recientes ataques de las FDI contra la estructura de mando político y comando militar de Hamás y otros adversarios en la región.
Vale recordar que no es la primera vez que las fuerzas hutíes lanzan un ataque con drones y misiles contra Israel. Sin embargo, en otras ocasiones se logró interceptar exitosamente a casi todas las amenazas, a grandes distancias de ciudades como Tel Aviv. Particularmente la ciudad costera de Eilat, a orillas del Mar Rojo, ha sido una de las urbes que se ha visto más próxima a estos incidentes.
En su parte de prensa, el RAdm. Daniel Hagari también destacó que Israel está peleando una batalla con múltiples frentes, mencionando a Hamás en Gaza, a Hezbolá en el Líbano, grupos insurgentes en Siria e Irak y a los hutíes en Yemen. También recalcó la responsabilidad de Irán en este conflicto, ya que es el principal promotor al entregar armamento y financiar a muchos de estos grupos.
Al cierre de sus declaraciones, el portavoz de la FDI expresó que se continuarán realizando todos los esfuerzos para proteger a la población israelí y sus fronteras. “…Estamos evaluado la situación y tomaremos las acciones necesarias para proteger a nuestro país…”, concluyó Hagari. Esta última frase lleva a especular que en corto plazo se podría dar un respuesta de las FDI contra los hutíes, acciones que sin duda continuarán elevando las tensiones en la región.
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Seguramente esto es un llamado de alerta a las autoridades de Israel, ya que no pudieron dar alerta a los sistemas AA. Si en lugar de explosivos hubiera llevado algún otro tipo de carga bélica, iban a estar en problemas. Esto demuestra la vulnerabilidad del sistema AA israelí. Seguramente tomarán las medidas necesarias para que esto no se repita.
Israel se metió en un pantano, cuánto más se mueve, más se hunde. El problema es que un Patriot cuesta 3 millones de dólares, lanzar un AMRAAM cuesta 2,3 millones, y un dron sale por mil dólares. Un dron lanzado a 2000 km, que lo pusieron a 100 metros de la embajada de EUA. Voló 2000 km y las defensas no lo vieron (algún especialista en armamento, no en propaganda, que lo explique). La respuesta al ataque en Telaviv costó una fortuna y no cambia nada. Los sauditas bombardearon a los huties por 10 años y los rebeldes siguen ahí. EUA los bombardea hace meses y no consiguen asegurar la navegación en el mar rojo (el puerto de Eliat está quebrado/cerrado). Curtis LeMay dijo una vez, que bombardearia Vietnam hasta mandarlos a la edad de piedra. No se había dado cuenta que ya vivían en la edad de piedra.