Lograr el reconocimiento del Estado palestino por parte de potencias como Reino Unido y Francia probablemente no traiga alivio a las familias palestinas que escapan de los bombardeos israelíes mientras navegan las ruinas de lo que fueron sus ciudades en Gaza.
Tampoco parece tener importancia para los familiares israelíes de las personas aún secuestradas por Hamás.
Pero, aún así, es un hito.
Décadas después de la partición de Palestina en 1947 y los Acuerdos de Oslo de 1993, el reconocimiento del Estado palestino ha sido una de las grandes cuestiones de fricción en las relaciones internacionales.
Es el pilar de la solución de los dos Estados para el conflicto palestino-israelí, que ha tenido una profunda aceptación en la comunidad internacional pero una frustrada implementación.
Al momento, 147 países miembros de la ONU han reconocido a Palestina como un Estado. Crucialmente, no lo habían hecho Estados Unidos, Alemania, Francia y Reino Unido, entre otros, y desde luego tampoco Israel.
Esta inercia, sin embargo, parece estar a punto de sacudirse, luego de que Londres y París anunciaron sus intenciones de reconocer a Palestina como un Estado pleno en septiembre, durante la asamblea general de la ONU.
Otros se le sumaron rápidamente, entre ellos Canadá y Portugal, pero el giro de Londres y París, históricos aliados de Israel y miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, podría tener importantes efectos en la región especialmente a futuro.
Primero, claro, deberá concretarse.

El Reino Unido planeó un reconocimiento condicional. El primer ministro Keir Starmer, un laborista que apenas está comenzando su gobierno, dijo que su país reconocerá a Palestina en septiembre “a menos que el gobierno israelí adopte medidas sustanciales para poner fin a la terrible situación en Gaza, acepte un alto el fuego y se comprometa a una paz sostenible a largo plazo, reavivando la perspectiva de una solución de dos Estados”.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, no puso condiciones para el reconocimiento en septiembre. “La necesidad urgente hoy es que termine la guerra en Gaza y que se rescate a la población civil. La paz es posible”, dijo. Pero Macron está transitando los últimos años de su mandato (habrá elecciones en 2027 y no podrá ser candidato) y su gobierno se ha debilitado por el crecimiento de la ultraderecha en las elecciones legislativas, por lo cual es difícil ver sustentabilidad en la medida.
De cualquier forma, el anuncio tiene peso simbólico y muestra una tendencia decreciente en el apoyo internacional a Israel, aunque todo depende aún de la posición de Estados Unidos.

“Son los dos primeros países del G7 y del Consejo de Seguridad de la ONU que están considerando tomar esa decisión. Esto marca que incluso los amigos de Israel están diciendo: ‘es suficiente, hay que frenar lo que está pasando en Gaza’”, dijo Bronwen Maddox, directora y jefa ejecutiva del think tank británico Chatham House, en una entrevista en la radio Wbur.
En un reciente artículo, Maddox pidió al gobierno un británico hacer un reconocimiento sin condiciones, y argumentó que aunque sea “puramente simbólico”, el valor de ese símbolo ha aumentado.
Israel, por supuesto, está enfurecido.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo que los anuncios de Francia y Reino Unido eran una “recompensa al terrorismo”, en referencia al brutal ataque perpetrado por el grupo extremista palestino Hamas el 7 de octubre de 2023, que dejó 1.200 israelíes muertos y 251 secuestrados, muchos de los cuales siguen siendo buscados.
En la guerra desatada en Gaza posterior al ataque, han muerto más de 60.000 palestinos en los bombardeos de represalia y operaciones militares israelíes, y el territorio, bloqueado, se enfrenta a una hambruna sin parangón.
“El reconocimiento es una declaración inequívoca a Washington, a los israelíes, a los palestinos y a Oriente Medio de que el Reino Unido considera la creación de un Estado palestino junto a Israel como la única solución que garantizará el futuro de ambos pueblos”, escribió Maddox.
Marwan Muasher, investigador en el Carnegie Endowment for International Peace, un think tank con sede en Washington, considera en un artículo reciente que “al seguir apoyando una solución de dos Estados sin hacer nada en los últimos diez años para afectar su implementación, la comunidad internacional esencialmente ha dado a Israel poder de veto sobre este camino”.
“Con respecto al territorio (una de las premisas para considerar la existencia de un Estado), Israel ha hecho todo lo que pudo este año para destruir la posibilidad de un territorio contiguo en Cisjordania”, considera en tanto Maddox.

Reconocer a Palestina es una medida clave para avanzar en esta solución de los dos Estados, pero hacerlo solo como reacción a las acciones de Israel en Gaza puede no ser una buena idea, considera Karen Scott, profesora de Derecho en la Universidad de Canterbury en un artículo en The Conversation.
“Sienta un precedente peligroso: los países podrían optar por reconocer (o no) a Estados para presionarlos o castigarlos por infracciones del derecho internacional”, escribe Scott. “El reconocimiento condicional de Palestina por parte del Reino Unido probablemente sólo aumentará esta inestabilidad internacional en torno a la condición de Estado”.
¿Frenará, entonces, el reconocimiento del Estado palestino por parte de Francia y Reino Unido la hambruna en Gaza? ¿Llevará al fin de la guerra y una paz duradera? Es poco probable, mientras Estados Unidos mantenga su apoyo irrestricto. Pero los costos para Israel de continuar esta política siguen creciendo, abriendo puertas antes cerradas y sembrando dudas en lo que antes eran aliados incondicionales.
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Un artículo plenamente antisemita, con sólo unos renglones mencionando el detonante del actual conflicto: La masacre del 7 de Octubre. Es hipócrita como presionan y critican a Israel constantemente por “la hambruna en Gaza” falsedad que sólo es culpa de Hamas, quien hurta los envíos de comida, mientras parecen olvidar por qué la guerra persiste todavía, que todavía hay rehenes en Gaza siendo torturados. Deberían mencionar que fue Hamas quien se retiró de la mesa de negociación en Qatar.
Por último, parece que muchos olvidan que Gaza es gobernada desde hace más de 1 década por grupos extremistas que presumen el asesinato de civiies. Sólo un tonto pensará que, tras los múltiples conflictos tras su llegada al poder, el reconocimiento (o recompensa) que ofrecen Reino Unido, Francia y los demás
realmente llevarán a una paz, en un territorio gobernado por extremistas. Basta con ver nuevamente los videos del 7 de Octubre para recordar el tipo de personas que habitan en Gaza, orgullosos de lo que habían hecho.