El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó en una rueda de prensa en el Despacho Oval este martes que sus Fuerzas Armadas atacaron un barco con droga y narcotraficantes que provenía, técnicamente, de Venezuela. “Acabamos, en los últimos minutos, literalmente, de abatir un barco, un barco que transportaba droga, mucha droga en ese barco… y hay más de donde vino eso…. Estos salieron de Venezuela”, dijo Trump.
La noticia fue también confirmada por el Secretario de Estado, Marco Rubio, a través de su cuenta personal en la red social X, quien escribió: “Como [Trump] acaba de anunciar hace unos momentos, hoy el ejército estadounidense llevó a cabo un ataque letal en el sur del Caribe contra un buque narcotraficante que había partido de Venezuela y era operado por una organización narcoterrorista designada”.
Trump afirmó que el Jefe de Estado Mayor “hizo una labor excelente”, citando como ejemplo su trabajo “crucial para lo que ocurrió en Irán, para neutralizar una amenaza bélico-nuclear que se había materializado en meses”. Además, subrayó que “muchas drogas han estado viniendo a este país [Estados Unidos]” y que muchas de esas cosas provienen de Caracas. “Después de esta reunión lo verán”, afirmó.
Tensiones en aumento
Las recientes declaraciones surgen días después de que Washington intensifique su presencia en la región, aumentando también su presión sobre Venezuela. Casi a finales de agosto, la administración Trump inició el despliegue de tres destructores con sistemas de misiles guiados cerca de las costas venezolanas, en el marco de una ofensiva más amplia contra los carteles latinoamericanos y sus redes internacionales.

En su momento, el gobierno estadounidense también optó por duplicar a 50 millones de dólares la recompensa por la captura del presidente Nicolás Maduro, acusado de narcotráfico y de colaborar con organizaciones criminales transnacionales. Sin dudas, Estados Unidos busca consolidar su influencia regional al enfrentar simultáneamente a los carteles latinoamericanos y al gobierno de Nicolás Maduro, al que acusa de ser un actor central en las redes de narcotráfico internacional.
A la estrategia de Washington se suma la designación del Tren de Aragua, MS-13 y otros seis grupos criminales mexicanos como organizaciones terroristas.
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