Suecia refuerza su compromiso con la OTAN al enviar tropas a la primera línea de defensa en Letonia, anticipándose a su posible adhesión a la alianza liderada por Estados Unidos.
Aunque Suecia aún no ha formalizado su ingreso a la OTAN, el despliegue de tropas suecas en Letonia marca un paso significativo en su colaboración activa con la alianza. El país escandinavo, previamente neutral, está respondiendo a la creciente preocupación por una posible invasión rusa en la región del Báltico.
La decisión de enviar un batallón compuesto por aproximadamente 600-800 soldados y blindados pesados es parte de la iniciativa de la OTAN conocida como “Presencia Avanzada Reforzada”. Este contingente sueco se unirá a la fuerza de defensa frente a posibles amenazas en la región báltica, permaneciendo en Letonia con rotaciones semestrales.
La decisión de Suecia de buscar la adhesión a la OTAN se produjo después de la invasión rusa en Ucrania. Aunque presentó su candidatura en mayo de 2022, enfrentó obstáculos, principalmente de Turquía y Hungría, que buscaban concesiones políticas de Estocolmo.
Recientemente, el Parlamento turco ratificó la candidatura sueca, eliminando uno de los principales obstáculos para la ampliación de la OTAN. Sin embargo, Hungría sigue oponiéndose a la adhesión de Suecia, liderada por el primer ministro Viktor Orbán. La oposición de Orbán se deriva de desacuerdos sobre críticas a la situación del Estado de Derecho en Hungría, críticas que él niega.
A pesar de las tensiones diplomáticas, Suecia ya participa plenamente en las maniobras de la OTAN “Steadfast Defender 2024”, las más significativas desde la Guerra Fría. Este compromiso destaca la importancia estratégica de Suecia en el contexto de la seguridad europea y su papel cada vez más activo en la alianza militar occidental.
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